jueves, 2 de junio de 2016

Primera Vista


Presidente Mario Rajoy de España con Presidente Barack Obama de Estados Unidos


Cuando se habla de España en el mundo estadounidense, se habla de la corrida de toros, las fiestas de Barcelona, el fútbol y las bebidas baratas. Se sueña con viajar al paraíso que es España y tomar vino, probar aceite de oliva de alta calidad y bailar música ‘techno’ en una discoteca de Ibiza. España es el lugar para descansar, vacacionar y pasarlo bien. Aquí se conoce al ‘amor de verano’ exótico y se aprenden algunas palabrotas en español. Debido a Hollywood y la televisión, esta es la imagen que un estadounidense tiene de España. Del mismo modo, en España se considera a Estados Unidos un país lleno de oportunidades,  armas, comidas rápidas y desarrollo tecnológico. Un país que ya está dominado por Donald Trump y personas famosas como Kim Kardashian y Drake.
Es fácil crear una noción preconcebida basada en lo que vemos en el mundo ficticio de la diversión. Sin embargo, estas ideas pueden ser ajenas a la verdad de las personas que viven en estos países. Los estereotipos sobre España en los medios estadounidenses son sueños descabellados para los españoles, que se esfuerzan por encontrar trabajo y ganarse la vida en los tiempos de crisis económica. El español joven no tiene tanto dinero para salir en una ciudad cara como Barcelona o Ibiza. La España que los jóvenes conocen está lejos de ser un ‘paraíso’. En los EEUU, el epítome de la civilización occidental, se encuentran aún muchos problemas de racismo, inmigración y encarcelamiento que transcienden la cultura de la ‘telerrealidad’ y las bufonadas escandalosas de Trump.
En nuestro mundo tan visual, ya no funciona el concepto de ‘lo que ves es lo que hay’, porque casi todo lo que vemos en nuestras pantallas es algo que los medios quieren que creamos – para poder promocionar sus propios planes. Debemos ejercitar nuestro juicio para determinar lo que es la verdad y lo que es una perspectiva sobresimplificada o propaganda. A mi modo de ver, la mejor manera de saber lo que realmente está pasando en un lugar es viajar. Sin embargo, viajar no es una opción muy factible para todo el mundo. Entonces, para evitar o verificar los estereotipos y las nociones romantizadas o negativas que tenemos, podemos tratar de consumir información de fuentes que son fiables y que tienen menos prejuicios. Necesitamos evaluar un dato en una manera que no solo mantenga la integridad de la asignatura, sino también considere los prejuicios que el creador pueda tener. La próxima vez que leas sobre las fiestas locas de Barcelona, intenta desafiar la noción que la cultura de la ciudad empieza y termina así – y pregunta: ¿Qué realmente pasa allí?


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